¡Tenemos una España,vestida de azul
con su camisita,
y su canesú.... !
Igualito que cuando era pequeña. Entonces había "autoridad", como quieren los camisas azules, y en el colegio la maestra me incrustaba el pedrusco de su anillo en mi cara. No es que me portara mal, qué va! si a en mí funcionaba su represión!, no, era porque no me entraba el solfeo en mi sesera. Acabé cantando aquella canción como una almeja, nota tras nota, la mano marcando todo aquello que, por fin, me aprendí de memoria. Que lo entendiera era lo de menos.
retrocedemos como los cangrejos... pero más deprisa. No obstante, muchos seguimos contra viento y marea.
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