¡Tántas luchas por salir de una dictadura en donde no se podía ni hablar, porque te ponían en la lista de sospechosos rojos, tántos esfuerzos y en muchos casos vidas, para conseguir que las leyes nos permitieran respirar, hablar, protestar, cuando no se está de acuerdo con lo que los políticos cocinan para nosotros.... El dictador y sus secuaces se habían cargado todo el progreso que con la República se había conseguido en España, uno de los países más avanzados en libertades y asuntos sociales de aquella época. Luego,en la transición, haciendo unos equilibrios que nos tuvieron a todos con el ay en la boca, pudimos recuperar algo de aquellas libertades perdidas.
Dicen que las leyes están para cumplirlas. ¡Maravilla! Cambiándolas se soluciona todo. Y éso es lo que está haciendo este gobierno a quienes tantos ciudadanos españoles han dado la mayoría absoluta (absoluta se parece a absolutismo... ufff) Ahora ellos están cambiando las leyes a su antojo, porque ellos lo guisan y ellos lo votan. Nosotros nos lo comemos.
Con esta ley que quieren cambiar ya no veremos a los policías como ciudadanos del orden. Les veremos como veíamos los de mi generación a los grises: robots sin alma que actúan siguiendo órdenes, sin ninguna clase de contemplación.
La noticia: El Gobierno anuncia que quiere endurecer el actual delito de desobediencia contra la autoridad. Leerla
retrocedemos como los cangrejos... pero más deprisa. No obstante, muchos seguimos contra viento y marea.
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